¿Qué es el contrato de
honorarios?
El contrato a honorarios es una
convención en virtud de la cual una parte se encuentra obligada a prestar
servicios específicos, por un tiempo determinado a favor de otro, el que a su
vez se obliga a pagar una cierta cantidad de dinero por dichos servicios. Se
rige por las reglas relativas al arrendamiento de servicios inmateriales,
particularmente en el artículo 2006 y siguientes del Código Civil.
Este contrato no puede tener una
duración superior al necesario para desarrollar la labor específica para la
cual se celebró, y está pensado para las personas que presentan servicios con
cierta autonomía, y son las partes las llamadas a determinar los términos y
formas en que se llevan a cabo los servicios, y la respectiva remuneración.
Diferencia entre el contrato
de trabajo y el contrato a honorarios
La diferencia relevante consiste
en la existencia de un vínculo de subordinación o dependencia entre las partes.
En este sentido cualquier actividad laboral que se realice bajo un vínculo de
subordinación y dependencia da origen a un contrato de trabajo y queda regida
por las normas del Código del Trabajo, generando para el trabajador todos los
derechos que le competen (límites de jornada de trabajo, descansos, vacaciones,
indemnizaciones, etc.). En consecuencia, la existencia de un contrato de
trabajo regido por las normas del respectivo Código depende de una situación
OBJETIVA: la existencia del vínculo de subordinación o dependencia, y no de la
intención de las partes, ni de la denominación que se le otorgue expresamente
en el contrato.
En virtud de lo expuesto, la
línea es muy delgada entre uno y otro, y muchas veces los empleadores intentan
otorgar la denominación de contrato de honorarios para disminuir los costos y
obligaciones que trae consigo un contrato de trabajo, pero, sin embargo, las
consecuencias pueden ser aún más onerosas y perjudiciales.
Antes de confeccionar un contrato
a honorarios se recomienda consultar con un profesional, para evaluar su
procedencia.
Dentro de las sanciones impuestas
por la Inspección del Trabajo, en esta materia, podemos mencionar, la
obligación de celebrar un contrato de trabajo en forma retroactivo, es decir,
desde de la fecha en que el trabajador comenzó a prestar servicios, con los
correspondientes descuentos legales y previsionales.
¿Cuándo estamos ante un
vínculo de subordinación o dependencia?
El Código del trabajo no define
ni desarrolla los elementos que permiten determinar cuando estamos en presencia
del vínculo de subordinación o dependencia, sin embargo la jurisprudencia
administrativa a establecido ciertos elementos que nos permiten determinar la
existencia de una relación laboral, como lo son ; la continuidad de los
servicios prestados, la obligación de asistencia del trabajador, el
cumplimiento de un horario de trabajo, la supervigilancia del empleador en el
desempeño de las funciones, la subordinación a instrucciones y controles de
diversas índoles, entre otros.
¿Qué trabajadores pueden
trabajar a contrato de honorarios?
En términos general aquellos que se
realizan sin vínculo de subordinación y dependencia. El código civil contempla
tres tipos de contratos que pueden realizarse bajo régimen de pago a
honorarios:
1.
El mandato, mediante el cual se confía la
realización de ciertas gestiones a otra persona.
2.
El contrato de confección de obra material, por
el cual una persona se compromete a realizar una obra por cierto precio. Su
objeto es el producto final, por ejemplo: un cuadro.
3.
El arrendamiento de servicios, que es lo más
parecido al contrato de trabajo y por el cual una persona se compromete a
prestar un servicio a otra por cierto precio. Obviamente, no puede ser bajo
vínculo de subordinación o dependencia
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